La comunicación efectiva con los hijos es fundamental para construir una relación de confianza y respeto.
Sin embargo, no siempre es fácil hablar con ellos. A veces, nuestras buenas intenciones pueden resultar en un desastre total.
Pero no te preocupes, hoy te traigo algunos consejos para que puedas comunicarte mejor con tus hijos e hijas.
1. Aprende a escuchar
Este es un consejo muy básico, pero es la clave de cualquier buena comunicación.
Si quieres que tus hijos te hablen, tienes que escucharlos.
Y no me refiero a estar presente físicamente mientras miras tu teléfono, sino a escucharlos de verdad. Deja de lado tus pensamientos y preocupaciones y concéntrate en lo que te están diciendo. Si logras escucharlos de verdad, podrás entender mejor sus perspectivas y encontrar una solución juntos.
2. No te tomes las cosas demasiado en serio
Ser madre y padre es una tarea muy importante y a veces, nos tomamos las cosas demasiado en serio.
Pero, ¿quién dijo que ser padre tiene que ser aburrido y estresante todo el tiempo?
Diviértete con tus hijos, ríe con ellos y disfruta el tiempo que pasas juntos. Esto no solo ayudará a construir una relación más cercana, sino que también hará que tus hijos se sientan más cómodos hablando contigo.
3. Usa el humor
El humor es una herramienta muy poderosa para conectar con tus hijos.
A veces, cuando ves que las cosas pueden torcerse (y aún no se han torcido), un chiste o una broma bien colocada puede romper la tensión y hacer que todos se sientan más relajados. Además, compartir un sentido del humor con tus hijos puede ser una gran forma de construir una relación más cercana y amistosa.
4. No te conviertas en su enemigo
A veces, cuando tus hijos te cuentan algo que no te gusta o no estás de acuerdo, puedes sentir la necesidad de defenderte a uñas y dientes (y, al final, convertirte en su enemigo).
En lugar de eso, intenta ponerte en su lugar.
Si tu hijo está teniendo problemas con un amigo en el colegio, por ejemplo, trata de entender cómo se siente y escucha lo que tiene que decir. Si te conviertes en su enemigo, es menos probable que quieran compartir cosas contigo en el futuro.
5. No des consejos a menos que te los pidan
Como padres, queremos proteger y guiar a nuestros hijos, pero a veces, damos consejos que no han sido pedidos.
Si tus hijos te cuentan algo que les preocupa, no te dediques a dar consejos inmediatamente.
En lugar de eso, escucha y apoya su perspectiva.
Si te piden consejo (o puedes preguntarle ¿quieres mi consejo?), entonces puedes ofrecerlo, pero recuerda que tus hijos son individuos únicos y capaces de tomar sus propias decisiones.
6. Reconoce cuando te equivocas
Nadie es perfecto, y eso incluye a las madres y padres.
Si te equivocas, reconócelo y pide disculpas.
Tus hijos aprenderán más de tus acciones que de tus palabras. Si ven que eres capaz de admitir tus errores y tomar responsabilidad por ellos, aprenderán a hacer lo mismo.
En resumen, comunicarse efectivamente con los hijos no tiene por qué ser una tarea difícil. A veces, un toque de humor puede ayudar a aliviar la tensión y hacer que ambos se sientan más cómodos.
Recuerda escuchar de verdad, ser un buen oyente y evitar tomar las cosas demasiado en serio.
Usa el humor, ponerte en el lugar de tus hijos, no te conviertas en su enemigo y no des consejos a menos que te los pidan. Reconoce cuando te equivocas, no uses el teléfono mientras estás hablando con ellos y sé claro y directo.
Si aplicas estos consejos en tu vida diaria, podrás construir una relación de confianza y respeto con tus hijos y comunicarte efectivamente con ellos.